la luna me pone iracunda
con una lanza entre los dientes
me vuelve sobre mi eje,
me obliga a rotar
soy un lobo horizonte y noche
me quito la piel
que arde
nado
no llega nunca a calmarse
la vuelvo a quitar
muda se transforma
se hace de hierro
me quito la piel
que arde
nado
no llega nunca a calmarse
la vuelvo a quitar
muda se transforma
se hace de hierro
aunque se abrace al último vestigio de la lira
esta lengua
es
puro naufragio
ha perdido todo
no le queda más que el esqueleto
llagado por la sal,
aunque se disfrace
y una máscara
pesada como siglos
nos estampe
la cara impávida de la luna
ha perdido todo
no le queda más que el esqueleto
llagado por la sal,
aunque se disfrace
y una máscara
pesada como siglos
nos estampe
la cara impávida de la luna
este rostro
no se devela
se disfraza
incansablemente
plegado sobre sí mismo
como el papel donde firmaron
la guerra
aquellas madres
la hoguera donde quemaron
sus cuerpos violados
hasta el hartazgo
humillados
silenciados
bajo el signo de lo oculto
bajo el signo de la no verdad
no se devela
se disfraza
incansablemente
plegado sobre sí mismo
como el papel donde firmaron
la guerra
aquellas madres
la hoguera donde quemaron
sus cuerpos violados
hasta el hartazgo
humillados
silenciados
bajo el signo de lo oculto
bajo el signo de la no verdad
una tierra
que nos tragó calladas
nos hicimos piedras
nos movimos en un mundo
que escupió
hasta nuestra mortaja
entramos
en el altar
en el palacio
nos pusimos la venda
que nos dejaron perfumada
una y otra vez
porque ningún esclavo
quiere saber que es esclavo de verdad
mujer
es el nombre de la no verdad
una piel insana
que dibujé con signos
un vestido que ciñó
la cintura de mis ideas
hasta dejarlas sin aristas
inocuas
con los filos para adentro
todas destentadas
las nodrizas sucias
que crían bastardos
las estatuas rubias
que llamaron con mi mismo nombre
pero no
mi nombre no es silencio
mi nombre no es verdad
que nos tragó calladas
nos hicimos piedras
nos movimos en un mundo
que escupió
hasta nuestra mortaja
entramos
en el altar
en el palacio
nos pusimos la venda
que nos dejaron perfumada
una y otra vez
porque ningún esclavo
quiere saber que es esclavo de verdad
mujer
es el nombre de la no verdad
una piel insana
que dibujé con signos
un vestido que ciñó
la cintura de mis ideas
hasta dejarlas sin aristas
inocuas
con los filos para adentro
todas destentadas
las nodrizas sucias
que crían bastardos
las estatuas rubias
que llamaron con mi mismo nombre
pero no
mi nombre no es silencio
mi nombre no es verdad
ya no tengo los ojos cerrados
tenía una cara
y una excusa
antes de que el mundo fuera dado
yo me pintaba
el vientre de azul
y danzaba bajo mi astro
no tenía miedo:
tenía una cara
y una excusa
antes de que el mundo fuera dado
yo me pintaba
el vientre de azul
y danzaba bajo mi astro
no tenía miedo:
cantaba
en una lengua
ahora trunca
olvidada
por el pisotón del tigre
la yugular herida del monstruo
que siempre tiene miedo
que ante todo tiene miedo
nos encerraron hace tanto
que olvidaron
la amenaza de la pulcra simetría
de mi mano
en una lengua
ahora trunca
olvidada
por el pisotón del tigre
la yugular herida del monstruo
que siempre tiene miedo
que ante todo tiene miedo
nos encerraron hace tanto
que olvidaron
la amenaza de la pulcra simetría
de mi mano
mi lengua ya no es silencio
desoigo mi nombre
mururo
me salen alas
planeo en el fuego
sobre el ojo y las ruinas
mururo
me salen alas
planeo en el fuego
sobre el ojo y las ruinas
flotemos
porque caminar
no alcanza
vení, mi mano te abraza
mi mano es el mar donde nos curamos
porque el mar cura
hasta el perdón
salgo de la espuma
embestida
bajo el manto de una música
que ya no puedo nombrar
no me detengo
bajo el espejo
no me quiebro ante la luz
traigo al orden de este mundo
caos y dientes
espasmos y delirios
porque caminar
no alcanza
vení, mi mano te abraza
mi mano es el mar donde nos curamos
porque el mar cura
hasta el perdón
salgo de la espuma
embestida
bajo el manto de una música
que ya no puedo nombrar
no me detengo
bajo el espejo
no me quiebro ante la luz
traigo al orden de este mundo
caos y dientes
espasmos y delirios
cuerpos que se abren al tiempo
del deseo
perfectos en la noche
vamos al vuelo de las cavernas
al
bosque de las bestias
vamos,
nos esperan
para
hundir el miedo
vamos
de esta furia
ya no se puede volver atrás
de esta negra espesura
no queda nada
salvo el grito
mi lengua no es olvido
mi Voz ya no es silencio.
no queda nada
salvo el grito
mi lengua no es olvido
mi Voz ya no es silencio.